Los nervios de una cita en la época de mis padres o de una habladuría viciosa en la de mis abuelos... más adulto que todo eso, casí como con la seriedad de macas de barrio que se dicen que se quieren y demás puercas mentiras; y cada uno a su casa. Sí, va a ser más o menos así.
Frases bonitas no pronunciadas por no hacer daño; con ternura ambivalente.
Calculando un paquete de tabaco sin abrir y controlando la cerveza en sangre, que nos jugamos mucho. Esta es una historia que no tiene un final en la cama, ésta empezó saliendo de la cama.
Después, si todo ha salido bien, me comeré un kebab y le haré el rato agradable a quién esté en el local; salpicando.
Es lo que tiene querer mantener a alguien lo suficientemente cerca; que no te puedes exponer eternamente.
lunes, 17 de agosto de 2009
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será que todo es un entrar y salir de la cama
ResponderEliminarno conozco otro templo más sincero
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